Siempre que pienso en la cantidad de botas y botines que tengo, recuerdo con envidia el armario que Mr. Big le regala a Carrie Bradshaw en la peli “Sexo en Nueva York”. ¿Os acordáis?
Y es que tengo que reconocer que hay dos cosas de las que no puedo prescindir: los bolsos y las botas. Estos dos accesorios de moda pueden convertir un outfit sencillo en un look espectacular. Solo hace falta un sutil toque de creatividad y la combinación quedará perfecta.
Las botas y botines nos vuelven locas, y los diseñadores lo saben. Por esa razón, tenemos hoy en día un sinfín de modelos de botas y botines como los de nuestra colección EDICIÓN LIMITADA, que te permiten lucir un diseño distinto para cada ocasión.
¿Pero sabíais el origen de nuestro calzado más adorado? ¿O cómo ha evolucionado hasta convertirse en la bota contemporánea que conocemos?
Aprende sobre esto y mucho más con las curiosidades sobre botas y botines que nunca te han contado. ¿Empezamos?
Origen de las botas como calzado protector
Existen los primeros indicios de botas ya en el año 15000 aC en la antigua Mesopotamia.
En esa época las usaban hombres y mujeres, indistintamente, y su función principal era la de proteger, no solo del frío, sino también, en la realización de sus labores cotidianas.
Las modas y estilismos los dejaremos para más adelante.
Las botas de oro de Julio César
Las botas siempre han estado relacionadas con el mundo bélico. Ya los romanos tuvieron que sustituir sus famosas sandalias por botas de cuero con clavos en la suela, las llamadas Caligae. Con ellas podían combatir el frío en sus incursiones por el Norte de Europa.
Se cuenta que Julio César llegó a tener unas botas de oro macizo para su Guerra de las Galias. ¡Antes muerto que sencillo!
La Reina Victoria, embajadora de la bota femenina
Con la llegada del siglo XIX, la mujer empieza a salir más de casa e impulsa el diseño de la bota femenina: modelos más delicados con botones o lazos.
En este contexto, la reina Victoria de Inglaterra popularizó lo que se llamó la “bota Balmoral” en honor al pueblo escocés. Esta cubría el tobillo, tenía suela gruesa y estaba confeccionada en cuero. Posteriormente, le incorporaron otros materiales como la seda o el tafetán, convirtiéndolas en un calzado para fiestas.
El tacón de las botas, ¿solo para mujeres?
El tacón no siempre ha sido un símbolo de feminidad, tal y como lo conocemos. De hecho, el tacón fue inventado por los hititas con un fin meramente práctico: ayudaba a fijar el pie de los jinetes en el estribo. Y, por supuesto, las botas fueron las primeras en llevarlo. Surgió como un taco que se adhería a la bota, qué tiempo después fue derivando al tacón actual.
Siglos después, en el XVII, los tacones ya se habían extendido por Europa y empezaron a estar más relacionados con el estilismo. En la Francia de Luis XIV, en 1670, se pusieron tan de moda que se estableció un decreto para que solo la nobleza pudiera utilizar zapatos de tacón. Y todo para disimular su corta estatura.
Hasta aquí por hoy. No te pierdas el siguiente post donde seguiré contándote más cosas curiosas sobre el mundo de las botas.
¿Conoces alguna curiosidad más? No dudes en compartirlo en nuestros comentarios.
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